El fin del mundo y antes del amanecer (recomendación)

Había escuchado cosas buenas sobre Inio Asano antes de leer este manga, pero, francamente, no me esperaba encontrar semejante obra de arte.

Voy a ser sincero: me topé con un ejemplar de este manga en una librería y me lo compré por la simple razón de que me habían recomendado al autor. A pelo, sin siquiera leer la sinopsis, sin saber absolutamente nada de lo que me encontraría en su interior, me lo compré y me dispuse a averiguar lo que Inio Asano podía ofrecerme.
Y, para mi sorpresa, lo que me encontré me regaló una de las pocas oportunidades que he tenido de agonizar con cada página que pasaba, sintiendo que faltaba menos para que algo tan lleno de vida y realismo se acabase. ¿Que el manga no es arte? Me río en tu cara.

Ya no hablo del dibujo, de la distribución de las viñetas, del uso del tintado para darle los toques adecuados a cada escena... Hablo de la trama, una realmente dolorosa en su belleza y completamente bella en su forma de hacerse doler. Este conjunto de relatos cortos (razón por la que no haré una sinopsis) recoge historias muy variadas, pero todas ellas mantienen en común su incitación a hacer meditar y a sacar algo en limpio de ellas. 

Con un estilo de dibujo y una manera de plasmar los hechos narrados que te hacen sentir que los estás viviendo junto a los personajes, Inio Asano nos muestra que no hace falta recurrir a argumentos rebuscados, sino mirar a tu alrededor -o incluso hacia atrás en tu vida- y usar un poco tu imaginación para crear historias increíbles.

Volúmenes: 1